Ya corté con todo lo que me hace mal. Ya dejé ir a la persona que me estaba poniendo nerviosa. Ya te lloré.
A veces las lagrimas no son suficientes para deshacernos del dolor que nos produce el otro, pero empezar a desprenderse de esa persona que te hizo mal en el pasado, sirve. Sin embargo y a pesar de haber soltado todo lo malo me siento parada ante el mundo con inseguridad. No se donde estoy, no se quien soy, no se bien porque elegí todo lo que elegí todos este tiempo.
A veces me sostengo en mis pasiones y me apasiono tanto que me vuelvo vehemente ante ellas y me olvido del mundo y es justamente eso lo que me hace falta:mundo, pero en el mundo no me hallo, no me reconozco.
Creo que lo peor de los duelos bien hechos es tener que transitar por esta etapa la de no hallarse y sentir que a pesar de haber soltado tu pasado, éste sigue presente y no sabes bien quien sos en el presente.
Quiero volver a mi, a lo simple. No es que quiera, es que necesito volver a mi pero se me hace muy difícil cuando no se quien soy.
Leí por ahí que perderse ayuda a encontrarse y espero que sea así porque me quiero encontrar para dejar de sentir esta sensación de extrañeza tan grande que tengo.
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